. SISTEMA DE
CABLEADO ESTRUCTURADO
El cableado estructurado es la técnica
que permite cambiar, identificar y mover periféricos o equipos de una red con
flexibilidad y sencillez. Una solución de cableado estructurado debe tener dos
características: modularidad, que sirve para construir arquitecturas de red de
mayor tamaño sin incrementar la complejidad del sistema, y flexibilidad, que
permite el crecimiento no traumático de la red.

Elementos del cableado estructurado
Partiendo del subsistema de más bajo nivel jerárquico, se presenta la siguiente
organización:
- Localización de cada puesto de trabajo. A cada puesto deben poder
llegar todos los posibles medios de transmisión de la señal que requiera cada
equipamiento: UTP, STP, fibra óptica, cables para el uso de transceptores,
etcétera.
- Subsistema horizontal o de planta. Es recomendable la instalación
de una canaleta o un subsuelo por el que llevar los sistemas de cableado a cada
puesto. Las exigencias de ancho de banda pueden requerir el uso de dispositivos
especiales para conmutar paquetes de red, o concentrar y repartir el cableado
en estrella. En este nivel se pueden utilizar todos los tipos de cableados
mencionados: coaxial, UTP, STP, fibra, etc., aunque alguno de ellos, como el
coaxial, presentan problemas por su facilidad de ruptura o su fragilidad,
especialmente en los puntos de inserción de [t], con la consiguiente caída de
toda la red. Sólo si el sistema se compone de un número reducido de puestos, el
cable coaxial puede compensar por su facilidad de instalación. Además, no
requiere ningún dispositivo activo o pasivo para que la red comience a
funcionar. Subsistema distribuidor o administrador. Se pueden incluir aquí los
racks, los distribuidores de red con sus latiguillos, etcétera.
Subsistema vertical o backbone. Este subsistema está encargado de
comunicar todos los subsistemas horizontales por lo que requiere de medios de
transmisión de señal con un ancho de banda elevado y de elevada protección.
Para confeccionar un backbone se puede utilizar: cable coaxial fino o grueso
(10 Mbps), fibra óptica u otro tipo de medios de transmisión de alta velocidad.
También se pueden utilizar cables de pares, pero siempre en configuración de
estrella utilizando concentradores especiales para ello. Los backbones más
modernos se construyen con tecnología de redes FDDI o Gigabit Ethernet. Este
tipo de comunicaciones es ideal para su uso en instalaciones que requieran de
aplicaciones multimedia.
- Subsistema de campus. Extiende la red de área local al entorno de
varios edificios, por tanto, en cuanto a su extensión se parece a una red MAN,
pero mantiene toda la funcionalidad de una red de área local. El medio de
transmisión utilizado con mayor frecuencia es la fibra óptica con topología de
doble anillo.
- Cuartos de entrada de servicios, telecomunicaciones y equipos. Son los
lugares apropiados para recoger las entradas de los servicios externos a la
organización (líneas telefónicas, accesos a Internet, recepción de TV por cable
o satélite, etc.), la instalación de la maquinaria de comunicaciones y para los
equipamientos informáticos centralizados. En algunas organizaciones existen los
tres tipos de espacios; en otras, el cuarto de equipos incluye al de
telecomunicaciones y el de entrada de servicios es sustituido por un armario
receptor. Aunque no es estrictamente indispensable, se recomienda un cuarto de
comunicaciones por cada planta.

La especificación de cableado estructurado exige que los cables no superen los
90 m de longitud, teniendo en cuenta que se pueden añadir 10 m más para los
latiguillos inicial y final, de modo que el canal de principio a fin no supere
los 100 m, que es la distancia permitida por los cables UTP de categoría 5e.
También se especifican, por ejemplo, las distancias que hay que dejar alrededor
de los armarios para que se pueda trabajar cómodamente en ellos. Los estándares
más comunes sobre cableado estructurado son en ANSI/TIA/EIA-568 y
ANSI/TIA/EIA-569. Los armarios y distribuidores deben cumplir el estándar
ANSI/EIA-310.
Etiquetado de los cables
La norma EIA/TIA-606 especifica que cada terminación de hardware debe tener
alguna etiqueta que lo identifique de manera exclusiva. Un cable tiene dos
terminadores, por tanto, cada uno de estos extremos recibirá un nombre.
No es recomendable la utilización de un sistema de etiquetado con relación a un
momento concreto, es mejor, utilizar nomenclaturas neutras. Por ejemplo, si
etiquetamos un PC como [pc-dirección], y luego cambia el lugar del edificio en
donde se ubica la Dirección, habría que cambiar también el etiquetado, sin
embargo, se trata de que el etiquetado sea fijo.
Se recomienda la utilización de etiquetas que incluyan un identificador de sala
y un identificador de conector, así se sabe todo sobre el cable: dónde empieza
y dónde acaba. Por ejemplo, se podría etiquetar un cable con el siguiente
identificador:
03RS02-05RS24
Este cable indicaría que está tendido desde la roseta (RS) número 02 de la sala
03 hasta la roseta 24 de la sala 05. Las rosetas en las salas 03 y 05 irían
etiquetadas con 03RS02 y 05RS24 respectivamente.
Algunos modelos de
etiquetas para cables.
El cableado estructurado
Los cambios que se deben realizar en las instalaciones de red, especialmente en
su cableado son frecuentes debido a la evolución de los equipos y a las
necesidades de los usuarios de la red. Esto nos lleva a tener en cuenta otro
factor importante: la flexibilidad. Un sistema de cableado bien diseñado debe
tener al menos estas dos cualidades: seguridad y flexibilidad. A estos
parámetros se le pueden añadir otros, menos exigentes desde el punto de vista
del diseño de la red, como son el coste económico, la facilidad de instalación,
etcétera.
4. INSTALACIÓN ELÉCTRICA
Es muy importante que la instalación
eléctrica esté muy bien hecha. De no ser así, se corren riesgos importantes,
incluso de electrocución. Los problemas eléctricos suelen generar problemas
intermitentes muy difíciles de diagnosticar y provocan deterioros importantes
en los dispositivos de red. Todos los dispositivos de red deben estar
conectados con enchufes a tierra. Las carcasas de estos dispositivos, los
armarios, las canaletas mecánicas, etc., también deben ser conectadas a tierra.
Toda la instalación debe estar a su vez conectada a la tierra del edificio en
el que habrá que cuidar que el número de picas que posee es suficiente para
lograr una tierra aceptable. Otro problema importante que hay que resolver
viene originado por los cortes de corriente o las subidas y bajadas de tensión.
Para ello se pueden utilizar sistemas de alimentación ininterrumpida.
Normalmente, los Sistemas de alimentación ininterrumpida (SAI) corrigen
todas las deficiencias de la corriente eléctrica, es decir, actúan de
estabilizadores, garantizan el fluido frente a cortes de corriente,
proporcionan el flujo eléctrico adecuado, etcétera.
Diversos modelos de SAI.
El SAI contiene en su interior unos acumuladores que se cargan en el régimen
normal de funcionamiento. En caso de corte de corriente, los acumuladores
producen la energía eléctrica que permite guardar los datos que tuvieran
abiertos las aplicaciones de los usuarios y cerrar ordenadamente los sistemas
operativos. Si además no se quiere parar, hay que instalar grupos electrógenos
u otros generadores de corriente conectados a nuestra red eléctrica.
Básicamente hay dos tipos de SAI:
- SAI de modo directo. La corriente eléctrica alimenta al SAI y éste
suministra energía constantemente al ordenador. Estos dispositivos realizan
también la función de estabilización de corriente.
- SAI de modo reserva. La corriente se suministra al ordenador directamente. El
SAI sólo actúa en
caso de corte de corriente.

5. Normas de seguridad e higiene.
Seguridad Física
Garantizar la seguridad física de
la tecnología es una de las vías fundamentales para minimizar los riesgos en su
uso.
Las medidas de seguridad física
pueden ser divididas en dos grandes categorías: contra factores
ambientales como el fuego, la humedad, las inundaciones, el calor o el frío
y los fallos en el suministro de energía; y contra interferencias humanas
sean deliberadas o accidentales.
Contra factores
ambientales
Cuando la tecnología es alimentada por electricidad (y la mayoría lo es),
la seguridad de la fuente de energía es crucial.
Una fuente común de respaldo de energía es el denominado Suministro de
Energía Ininterrumpible (UPS por sus siglas en inglés). Suele
conectarse un UPS entre la principal fuente de energía y el componente
tecnológico, como un equipo de cómputo. Si la principal fuente de suministro
falla, la batería incluida en el UPS entra en operación inmediatamente y se
hace cargo del suministro de energía.
Algunos sistemas UPS son lo suficientemente poderosos para mantener el sistema
en operación por un periodo prolongado, por lo que es posible que los usuarios
ni siquiera se percaten que la principal fuente de suministro ha fallado y
pueden seguir trabajando. Sin embargo, como esta clase de sistemas UPS
requieren de potentes baterías para operar, suelen ser muy costosos. Otro tipo
de sistemas UPS menos costoso no pueden servir como sistemas de reemplazo
durante mucho tiempo.
Las descargas pueden ser peligrosas para los equipos de cómputo y pueden quemar
fusibles o componentes del equipo. Un sistema UPS intercepta una sobrecarga y
evita que llegue a un equipo sensible.
Otro aspecto
importante de la seguridad física es asegurar que el equipo tecnológico,
especialmente el de cómputo, esté debidamente resguardado. Idealmente, el
equipo de cómputo debe ser almacenado en edificios sellados con control de
clima, para que la temperatura y la humedad se mantengan a un nivel óptimo
constante y se eliminen contaminantes como la suciedad, el polvo y el humo. Es
usual que los sistemas convencionales de aire acondicionado que se utilizan
para controlar la temperatura en los edificios se empleen para estos efectos.
El equipo de comunicación es otro tipo de tecnología que requiere seguridad
física especial. En particular los cables de conexión de las redes de cómputo
requieren gran seguridad. Entre las formas de proteger los cables contra la
amenaza de roedores o humanos puede ser colocarlos dentro de ductos, tras
paredes, bajo piso o bajo techo, instalar pisos falsos para permitir que los
cables circulen sin problema, enterrarlos o montarlos sobre poleas. Cuando los
cables estén en riesgo, se pueden considerar alternativas como las de enlace a
través de microondas.
Contra factores humanos
El aislamiento físico, como colocar componentes clave o los servidores de las
redes en salones especiales, puede ayudar a reducir la posibilidad de
intervención humana. De igual forma, colocar los cables de las redes dentro de
las paredes o bajo suelos y techos torna difícil acceder a ellos.La medida
física más efectiva que se puede tomar para prevenir la intervención humana es
la de ubicar la tecnología dentro de sitios seguros bajo llave.
La tecnología moderna ofrece un amplio catálogo de dispositivos sofisticados
que pueden restringir la entrada a edificios o salones solo al personal
autorizado.
Entre ellos:
• Candados y cerrojos convencionales.
• Cerrojos operados por códigos de acceso (mecánico o automatizado).
• Cerrojos operados por tarjetas con bandas magnéticas.
• Cerrojos que reconocen rasgos físicos, como las huellas dactilares, de la
mano o la retina.
• Cerrojos que requieren una combinación de dos o más de estos dispositivos.